Miro como te muerdes
los labios
y te recuerdo
que soy un diente
anclado en un cuerpo,
y que hoy, aun
no he amado,
pero si Usted quiere
podemos amarnos
como los niños
y sus cometas
llegando hasta
las nubes,
como una pareja
de adolescentes,
mirando al suelo,
por si acaso,
como Usted quiera
si le digo que tengo algún año
pero que ninguno
sobra,
mi corazón palpita
todas las noches
cuando lo dejo
encima de mi mesita
y me mira y dice
que podemos amarnos
por la mañana
por la tarde, la
noche, o de madrugada
a tu lado
o en el mío, que
siempre estorba.