Nadie.
Existen los sueños
que contienen imágenes
y hay imágenes
que sólo son sueños,
pero tengo que
confesarte que el amor dijo basta
no porque hubiera,
existiera
o viniera otro,
si no, porque nunca
hubo nadie.
Nadie en quien
descansara aquellos ojos.
Nadie pensando
en otro Nadie,
mirando a través
de la ventana a los otros.
Nadie era Nadie,
ni ninguno de los
dos,
ni los dos juntos
somos Nadie,
al igual que los
callejones no tienen salida,
al igual que a
mí me gustaría estar aquí
cuando todo esto
termine, aunque ahora estoy aquí
cuando está todo
empezando.
El amor dijo fin,
porque fin, es
el final de algo
y en este final
no quedó Nadie,
aunque yo, seguía
necesitado una escalera
para alcanzar tus
labios.